Lo que NO te dicen del porno

4 de julio del 2019

Por: Diana Barragán

Gracias al internet, los contenidos pornográficos cada vez son más vistos por muchos cibernautas. Según las estadísticas del sitio pornográfico PornHub, en el 2018, el portal recibió un total de 33.5 billones de visitas, lo que se traduce a 92 millones de visitas diarias. La cámara muestra lo que el director quiere, pero... ¿qué hay detrás de ésta fantasía llamada porno?

Foto: Netflix

Las mujeres en la industria pornografía

La mayoría de las personas cree que una mujer que se dedica a éste tipo de trabajo sexual lo hace porque quiere, pero no siempre es así. Algunas chicas son obligadas a participar en la pornografía. Hay otros casos en los que ellas entran libremente (la mayoría por falta de recursos económicos). Sin embargo, algunas sufren maltratos, abusos y violaciones durante la filmación. A pesar de esto, miles de chicas de 18 a 20 años ingresan al porno aficionado cada año; proceden de pueblos y ciudades de todo los Estados Unidos.

John Anthony -actor porno- afirma que las chicas tardan de uno a tres meses, (en el peor de los casos) para que se ubiquen en el mercado; de tres a seis meses se considera algo bueno; y máximo, duran un año en la industria.

Algunas empresas de porno aficionadas, contratan a las nuevas chicas 2 o 3 veces. Si no tienen mucho éxito, ellas tienen que aceptar trabajos más específicos para seguir trabajando.

Foto: Todo Incluido

Consumo de drogas para las escenas

Algunas actrices y actores porno son obligados a consumir drogas para poder desempeñar su trabajo. En la búsqueda de una representación sexual espectacular, hacen uso del Viagra, de inyecciones que son aplicadas directamente sobre el pene para causar una erección inmediata. También llegan a utilizar Dorflex para relajar los músculos y favorecer las penetraciones anales.

Conexión entre la pornografía y violaciones fuera de la cámara:

Hay estudios que relacionan la pornografía con las violaciones de hombres a mujeres. Pero, estos estudios suelen estar sesgados.

La idea no es tan loca, puede ser posible. Erika Lust -productora de cine erótico- afirma que la presentación de actos violentos contra mujeres puede hacer que dicha violencia se reproduzca y se normalice. Declara Lust:

“La pornografía debería mostrar relaciones sexuales igualitarias (…) debería ser representativa de las realidades de la sociedad”.

"Sin duda, la pornografía es la educación de hoy. Algunos niños y jóvenes buscan el porno para aprender sobre el sexo. No hay alguien que les explique lo que es correcto y lo que no es".

Foto: Cultura Colectiva News

Dominación del hombre hacia la mujer:

En la pornografía, el poder masculino sobre las mujeres se representa por la posesión del poder sexual.

En el documental de Netflix Hot Girls Wanted, se ve el caso de la película porno Manipulando a una virgen: su primera penetración no fue la correcta, en la que Aka Ava Taylor -nombre artístico de Rachel, ahora exactriz porno- interpreta a una chica adolescente virgen, que tiene sexo inesperado con un amigo de su familia. Durante la filmación, Rachel no se sintió cómoda, ella confesó:

"Odie ésta última parte, no hay nada sexualmente excitante al respecto, nada. Digo, la pornografía es así. Me digo a mí misma que esto es sólo un trabajo. (…) en el mundo de la pornografía casera solo eres un pedazo de carne"

Con tan sólo ver el nombre de las películas porno, se puede observar la violencia y cosificación hacia ellas, por ejemplo: Una chica pueblerina, Nena abandonada y recogida, Ella necesita dinero, La nena de papá recibe todo, Tierna lolita destrozada etc.

Aka Ava Taylor agrega:

"Todas las películas son iguales; como si fuera tu primera vez siempre. Solo se trata de que él tenga placer, como si la chica estuviera ahí solo para servirte (…) siempre y cuando tengas senos grandes, vagina y un trasero, no les importa nada, no les interesa quién seas".

En el sitio de porno llamado Abuse Latino: “velas atragantarse de verga gringa”, se muestra una de las categorías más populares del porno: mamada obligada (forced blowjob).

En los vídeos que se suben a ésta web, se puede ver a una mujer haciéndo sexo oral a un hombre, mientras éste le dice insultos como: “di que eres una perra”; también es ahorcada y golpeada. Cuando el hombre eyacula, la chica tiene que beber el semen y ponerlo en un plato para comida para perros.

Según el documental de Netflix, en el 2014, los sitios porno con temática de abuso promediaron 60 millones de visitas al mes; más que los sitios de la NFL, NBA, CBS, Disney y NBC news. Se estima que el 40% del Internet contiene algún tipo de violencia contra la mujer. Los anuncios para sitios porno violentos como 18 & Abused -18 y abusada-, a menudo salen destacados en los sitios de porno corrientes.

Foto: ABC News

Las actrices son contagiadas de alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS):

Según Amarna Miller -exactriz porno y youtuber española- cada 15 días, los actores y actrices deben hacerse exámenes para detectar alguna ETS (son pagados por su cuenta). Sin embargo, hay algunas productoras que les prohíben a sus actores el uso de condón, porque según ellos, mostrar sexo sin protección tiene más éxito. En el 2015, California aprobó una ley que obliga a usar condones en la pornografía.

El pago por su trabajo:

Ser estrella porno es costoso, ya que las actrices deben pagar renta, lencería para las grabaciones, uñas, maquillaje, comida y vuelos. Las chicas que son nuevas en la industria pornográfica filman de 3 a 5 escenas por semana; ganan aprox. $800 dólares por cada una.

Aka Lucy Tyler -nombre artístico de Karly, exactriz porno- dice:

"Si en la escena te salpican el pecho, la espalda, el trasero, la cara y te lo tragas (el semen) te pagan lo mismo (…) pero los que pagan más son los creampies (…) es cuando eyaculan dentro de ti, aprietas y expulsas el semen. Se ve como un taco o una rosquilla rellena de crema”.

Chicas estafadas o violadas en supuesto castings porno:

Amarna Miller dice que es normal encontrar en sitios web de trabajo, propuestas para trabajar en el porno. En estos, “los productores” les prometen a las chicas, ganar por escena mucho dinero, filmar con una máscara, hacer las escenas que ellas quieran etc.

"En estos anuncios el “productor” te va a pedir que le envíes fotos en donde estés desnuda. También pueden pedirte un Skype donde estés desnuda para comprobar tus habilidades o intentara quedarse contigo y probar si puedes dedicarte o no al porno".

Estas personas intentan engañarlas para tener sexo con ellas y/o conseguir fotos intimas de ellas. Es gente que quiere aprovecharse de chicas que no tienen idea de cómo empezar en la industria. Gracias a la poca información entorno a la pornografía, agregando que en la industria pornográfica hay muy poca protección legal, las chicas caen fácilmente. Respecto a esto, Amarna agrega:

"No hay información en Google sobre los castings porno. ¿Qué es lo que pasa? Hay una categoría en el porno, en la que hay actores y actrices que tienen un contrato donde se ha pactado que el escenario y el guión de la escena será un supuesto casting porno. ¿Cuál es el problema? Cuando realmente intentas buscar sobre castings de porno falsos, únicamente te aparecen escenas porno en donde hay un contrato. Los videos tienen títulos como: Shy Blonde Sucks Cock In Castings, Cute Ass Russian Model In Casting, How Real Backroom Castings Look Like (Fake agent), German Takes A Cumload In Casting, Perfect Casting Fuck. Es imposible encontrar cómo detectar un casting falso".

Foto: ABC Color

La reputación de las actrices durante y después del porno:

Actualmente, gran parte de la sociedad considera a la industria pornográfica como un trabajo fácil. Sin embargo, la presión social por parte de amigos, familiares y de la sociedad en general, hace que a las actrices se les juzgue y estereotipe como mujeres "putas" que no merecen ser respetadas.

En una entrevista del 2016 con el sitio web 20minutos, Amarna Miller -cuando aún era actriz porno- confiesó:

"Adoro mi trabajo y me siento completamente orgullosa de ser una trabajadora sexual, pero estoy harta de las miradas de sorpresa, las mandíbulas abiertas (…). Cuando reflexiono sobre ello me siento frustrada. Frustrada por vivir en una sociedad en la que estoy y estaré estigmatizada de por vida simplemente por aparecer en internet teniendo sexo delante de unas cuantas cámaras".

Para Amarna , su carrera en el mundo del porno afecta en la manera en que se relaciona con la gente.

“Fantasean con mi personaje delante de las cámaras mucho antes de conocer a la persona que se encuentra detrás de ellas. Lo peor de mi trabajo no tiene que ver con mi trabajo, sino con las ideas y estereotipos que el común denominador de la población tiene sobre él".

"Y por este motivo es tan importante coger la batuta y de vez en cuando salir ahí fuera y decir “¡Eh! ¡Que antes de ser actriz porno, soy persona! (...)Que soy más (¡mucho más!) que un cuerpo con agujeros para penetrar".

Contratos abusivos en la industria:

Una de las razones por las que Amarna Miller dejó el cine para adultos, fue la falta de control sobre su imagen:

“Estoy harta de ver mi imagen en todos lados sin mi consentimiento”.

Según Miller, los contratos en la industria pornográfica son muy abusivos, ya que cuando una actriz lo firma, ésta cede su imagen a la productora para que la comercialicen y la vendan a terceros; lo hacen sin avisar y sin recibir un pago extra.

“Llegué a ver DVD's con mi cara, yo no sabía que existían (…) mi imagen era manipulada, de pronto aparecía en películas machistas que atentaban con mi ética y valores”.

Miller afirma que, si te quejas sobre algo en el porno, no trabajas. La mayoría de las empresas no avisan a sus actores y actrices que tipo de escenas van a filmar, sino hasta el día de la grabación.

Para Amarna, la industria del porno no está controlada legalmente.

"Es necesario una regulación, leyes que protejan a las actrices y actores porno, así como a todos los trabajadores sexuales. (…) cuando intentas prohibir el porno, lo que consigues es que se convierta en un negocio sumergido. No desaparece (…) más sumergido es igual a menos a menos regulaciones y precariedad de los derechos de los trabajadores".

Foto: Xconfessions.com

Si te interesa conocer más sobre la industria de la pornografía, te recomendamos el documental de Netflix llamando Hot Girls Wanted: Turned On.